EL POSTUREO
Hoy en día muchos jóvenes ven en
las redes sociales una moda, es decir, que esto implica un proceso de un cambio
de gustos o preferencias por parte de lo que ellos realmente quieren. Esto
cambios suelen ir vinculados a cambios económicos y sociales.
Las redes sociales se han convertido
en un medio más para vender y publicar. La moda es social por naturaleza y ha
encontrado en internet un medio perfecto para llevar a cabo su socialización.
En la actualidad, los términos como itgirl
y blogger son utilizados en
diversas disciplinas, entre ellas, la comunicación que consiguen las firmas a través
de estos iconos populares de moda. El fenómeno blogger es beneficioso para las marcas, y también para la itgirl a quien ayudan a definir su
perfil y a crear su propio estatus. Por tanto, ser un a influencer o itgirl es
equivalente a ser un icono.
Muchos jóvenes ven en ellos una
forma fácil de ganar dinero a la vez que van siendo reconocidos por marcas,
personas famosas y por la sociedad en general. De aquí, que muchos de ellos intenten
dar una versión de sí mismos que no es real, y a esto le llamamos postureo. Éste es considerado como un
fenómeno que sustenta, en términos generales, la actitud de aparentar ser algo
que no se es o tener algo que no se tiene, es decir, la actitud con la que la
gente juega a ser lo que no es, o al menos a hacer cosas que esperan un
reconocimiento social de cara a la galería.
El postureo es la inmediatez patrocinado
por las redes sociales, convirtiendo a las personas en seres que buscan siempre
el sentirse superiores a los demás, mostrándose más felices que el resto, es
decir, es una continua competición por destacar, esto suele llevar a una
división de clases. Todo esto se debe en parte, a lo dicho al principio, por el
gran poder que ejercen tanto las redes sociales como los medios de comunicación
que existen en la sociedad.
La imagen proyectada sobre los demás
puede ser fundamental para la integración en el grupo y el reconocimiento de éste.
Todo esto forma parte de los mecanismos sociales más comunes para generar identidad
grupal y, al mismo tiempo, reconocimiento social: produce seguridad, sentido de
pertenencia (al menos aparente), que forma parte de la creación de identidades
colectivas, en un mundo donde la individualidad, salvo en el terreno económico,
ha sido perseguida por romper con las tónicas dominantes.
REFERENCIAS
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